Probablemente a algún amigo, familiar o conocido se le haya “salido el hombro” alguna vez o incluso le suceda de forma recurrente. El “hombro dislocado” es el nombre coloquial que se le da a la Luxación de hombro, eso sucede cuando los ligamentos se rompen provocando que la cabeza del húmero se salga del glenoide.
Este tipo de lesión se presente generalmente en deportes de contacto pero puede sucederle a cualquier persona que sufra un traumatismo directo. Se caracteriza por presentar mucho dolor, deformidad importante en esta articulación e inmovilidad.
¿Qué se debe hacer cuando se produce una luxación?
Lo más importante es suspender la actividad que se está realizando, evitando mover el hombro. Las personas que no estén en la facultad de atender este tipo de lesión e incluso el mismo paciente deben abstenerse de manipular la articulación o intentar aliviarla. Se debe sujetar el brazo con un cabestrillo y consultar con un especialista inmediatamente.
El tratamiento a seguir varía según el tipo de luxación y si es la primera vez que se produce o es un repetitiva. En el primer caso se procura dar un tratamiento terapéutico después de un periodo de inmovilización con cabestrillo, frío local y antiinflamatorios. Esta rehabilitación se hace principalmente para recuperar la movilidad del hombro, tonificar la musculatura y mejorar la propiocepción.
Permitir que la rotura o distensión cicatrice correctamente es clave para una recuperación exitosa, por lo que se recomienda un periodo de reposo de entre dos y tres semanas. De esta manera se disminuye la recidiva de la luxación.
En el segundo caso, cuando se produce más de una vez, es necesario entrar a revisar la opción quirúrgica. A través del retensado capsulolabral, una cirugía artroscopica mínimamente invasiva que devuelve al hombro la estabilidad y movilidad. Cada recurrencia produce un deterioro progresivo en las estructuras de la articulación, sin un tratamiento adecuado y oportuno se pueden producir graves consecuencias sobre la misma a largo plazo y disminuye la posibilidad de obtener resultados satisfactorios y exitosos.
Este tipo de lesión es común, los primeros cuidados que se brindan y el tratamiento holístico posterior son fundamentales para una recuperación exitosa, un retorno a las canchas satisfactorio, en el caso de los deportistas, y volver a su vida diaria sin complicaciones.