El deporte después de un Reemplazo de rodilla

Anualmente se realizan 500.000 reemplazos articulares en el mundo y conocemos gracias a los registros de estas cirugías que los reemplazos realizados a temprana edad (<55 años) tienen menor duración del mismo. 

Los pacientes con Artrosis de rodilla tienen menor fuerza muscular, resistencia al ejercicio y capacidad aeróbica que una persona sin artrosis. Los Reemplazos articulares son procedimientos que han demostrado que mejoran el dolor, permiten recuperar la función de la articulación y la función mental de los pacientes. Por lo cual es un procedimiento altamente efectivo cuando está indicado.

Una de las dudas más frecuentes antes y después de realizar un Reemplazo articular de la rodilla es qué deporte puedo realizar de una forma segura para no afectar mi cirugía. Para dar esta recomendación me baso científicamente en 3 aspectos:

• Desgaste del reemplazo articular: Normalmente con la movilidad de la rodilla se liberan partículas del Polietileno las cuales generan una cascada inflamatoria de la rodilla (aumento de macrófagos, Prostaglandina E 2, interleukina –1, FNT) los cuales, a su vez, generan una Osteólisis (perdida de hueso) alrededor del implante y aflojamiento del mismo. Por esta razón, el grado de actividad posterior a la artroplastia es un tema que influye en la longevidad del mismo.

• Cargas Articulares y Momentos en la rodilla: Como dije anteriormente, el desgaste de la artroplastia tiene relación con la carga articular en la rodilla por lo cual es importante el conocimiento de la carga articular con la práctica deportiva.

• Caminar: Genera una carga de rodilla entre 2.8 a 4.3 por el peso de la persona lo cual se ha encontrado que es una carga segura para la artroplastia de rodilla y llevando una caminata a 5 a 7     km /h se pueden lograr los efectos benéficos cardiovasculares del ejercicio.  La velocidad de la caminata determina la carga de la rodilla ( más rápido más carga en la rodilla)
• Bicicleta: Genera una carga baja en la rodilla, y la carga está influenciada por la resistencia mas no por la velocidad del pedaleo. Si queremos disminuir la carga de la rodilla hay que tener la silla alta. Lo ideal es baja resistencia, alta cadencia y sillín alto.
• Correr: Genera una carga elevada en la rodilla y se incrementa al aumentar la velocidad del mismo por lo cual no es una práctica segura posterior a un reemplazo articular.
• Senderismo: Subjetivamente se conoce que los pacientes que realizan senderismo con los descensos se genera una carga elevada en la rodilla lo cual produce dolor en el muslo posterior a esta práctica y si se aumenta la velocidad de descenso genera un aumento de carga de la rodilla

• Inactividad y Fijación del Reemplazo: Es lógico pensar que si disminuimos la actividad física se va a producir menor desgaste de la prótesis; pero esta relación no es la mejor debido a que si disminuimos la actividad deportiva en los pacientes vamos a producir:

  • Disminución de la capacidad aeróbica de los pacientes
  • Disminución de la coordinación
  • Disminución de los reflejos posturales
  • Disminución de la masa muscular
  • Disminución del nivel de calcio en los huesos (Disminuye la fijación de la prótesis al hueso)

Por lo tanto, la práctica deportiva de bajo impacto tiene un efecto benéfico al mejorar la fijación de la misma al hueso y beneficiando los demás sistemas del paciente.

Deportes recomendados

Conclusión:

Los pacientes deben mantener una actitud positiva y proactiva para continuar y retomar la práctica deportiva gradual posterior al Reemplazo total de rodilla por los beneficios en la salud, prevención de eventos coronarios, mejorar la calidad ósea y la fijación de la prótesis.

Pero deben tener claro que la practica debe ser de bajo impacto (Caminar, Bicicleta, Natación, Achua Terapia) 3 a 4 veces por semana por 30 a 40 minutos.