En cualquier momento de nuestra vida podemos llegar a sentir dolor en el hombro, dependiendo de la edad se pueden presentar diferentes situaciones con nuestros tejidos, especialmente los tendones y ligamentos. A medida que crecemos y envejecemos, los componentes de la articulación cambian y se pueden presentar desgarros normales.
Cuando hablo de desgarros normales, me refiero a que el hombro es una de las articulaciones que más utilizamos durante nuestra vida, por lo tanto se espera que exista cierto desgaste en algunos de sus componentes. Eso no significa que todos los desgarros o rupturas deban ser operadas, en muchos casos encontramos que están presentes pero el paciente no tiene ningún tipo de molestia o limitación de movimiento, es completamente asintomático. Es necesario realizar una revisión integral para determinar si se requiere o no un procedimiento y no causar más daño que beneficio.
Las razones de por qué te duele el hombro son variadas y depende mucho de tu edad. Por ejemplo, los niños y adolescentes no tienden a sufrir lesiones por sobreuso de la articulación, la principal causa de dolor son los traumas agudo que puede producir desgarros en el cartílago, lesiones SLAP o luxaciones. En el caso de los adultos funciona de manera diferente, los traumas agudos no son la principal causa de consulta, por lo general el uso y sobreuso del hombro producen cambios degenerativos a nivel del manguito rotador generando dolor, rigidez y debilidad del hombro.
Los principales motivos de consulta en adultos son:
- Tendinitis por uso excesivo: Es más común en deportistas. El dolor es moderado a intenso y suele responder bien a un tratamiento conservador.
- Tendinosis degenerativa: El dolor se da progresivamente hasta el punto de producir gran incomodidad en el paciente.
- Desgarro del manguito rotador: El tendón se ha desgastado y se produce un desgarro. Dependiendo del tipo de desgarro y si se presenta o no dolor se puede establecer un manejo ortopédico.
- Hombro congelada: La cápusula que rodea al hombro y los ligamentos se engruesan y endurecen. El paciente presenta perdida de movilidad del hombro, llegando hasta el congelamiento del mismo. La recuperación total puede tardar hasta 2 años.
- Inestabilidad en el hombro: Se produce a causa de una luxación del hombro, es decir que la cabeza del húmero se “sale” de su lugar, ya sea por un traumatismo o porque los tendones son muy laxos.
- Osteoartritis: Existe un desgaste del cartílago articular que está produciendo que los huesos se rocen, lo que resulta muy doloroso para el paciente y limita su movilidad.
- Tendinitis calcificada: Dentro de los tendones del manguito rotador se producen depósitos de calcio que limitan el movimiento y producen dolor. Usualmente con el tiempo los depósitos ceden y desaparecen, o pueden utilizarse infiltraciones dependiendo del caso.
- Tendinitis del bíceps: El tendón superior del bíceps se inflama e irrita produciendo dolor. Según el caso del paciente puede recomendarse un manejo ortopédico conservador. Si se ha presentado un trauma y el dolor dura más de unos cuantos días o si empeora, lo mejor es consultar con un especialista de hombro para establecer un diagnóstico acertado y poder definir un plan de recuperación acorde al estilo de vida del paciente y su lesión.